El actor recibirá el próximo sábado el Goya de Honor en homenaje a toda su carrera
A escasos días de recibir el Goya de Honor, José Sacristán continua la gira con el monólogo de Miguel Delibes ‘Señora de rojo sobre fondo gris’. Trabajador incansable, el actor de 84 años sigue aceptando todo lo que puede. Aunque el teatro es su refugio, el cine sigue siendo su escapada. A día de hoy, el de Chinchón puede presumir de una prolífica carrera cinematográfica de lo más singular, siendo uno de los actores españoles que más películas ha hecho. Una gran variedad de títulos y personajes que se verán resumidos a modo de presentación ante uno de los Goya más aclamados. Para esta selección, que comienza en 1971, obviamos, con pena, una gran colección de clásicos y contemporáneos magníficos. Pero, he aquí la estudiada selección de 10 películas de José Sacristán, que son imprescindibles no solo para entender su carrera, sino para entender la historia de nuestro cine.
‘Vente a Alemania Pepe’ (1971)
Dirigida por Pedro Lazaga en 1971, la película se centraba en las experiencias migratorias que muchos españoles vivieron a mediados del siglo XX. José Sacristán, residente en Alemania, regresa unos días a su castizo pueblo castellano para “fardar” ante sus vecinos los privilegios y avances cotidianos que ha logrado trabajando en Europa. Logra convencer a Alfredo Landa para comenzar de cero una nueva vida trabajando en la capital alemana, alejándose así de una posesiva Tina Sáinz. Juntos, trabajaran y residirán junto a otros españoles, también migrantes como Gemma Cuervo, Fernando Guillen o Josele Román.
‘Las largas vacaciones del 36’ (1976)
Jaime Camino tuvo la valentía y la ocurrencia de relatar cinematográficamente hablando, por primera vez, la Guerra Civil española. Recién muerto el dictador, Camino se nutrió de un poderoso reparto (Concha Velasco, Paco Rabal o Ángela Molina entre otros) para estrenar este drama histórico. Ambientada en el inicio del conflicto, la historia se centraba en gente popular de distinta ideología que trataban unas complicadas y largas vacaciones, que terminaron “relativamente” en tres años.
‘Asignatura Pendiente’ (1977)
La primera película dirigida por el después oscarizado José Luis Garci, que marcó a una generación de testigos directos de la Transición. Pionera también en la producción y la posproducción, estuvo protagonizada por José Sacristán y Fiorella Faltoyano. Ambos interpretaban a la pareja protagonista, José y Elena, antiguos compañeros y amigos que se reencontraban tras haber formalizado sus respectivas vidas sentimentales, con la intención de vivir aquella ilusión que, en su día, no pudieron llevar cabo. Una historia social que marcó y realzó a una generación que se identificó con sus dos protagonistas desde el primer momento. Por cierto, pese a que esta es uno de sus títulos más destacados, Sacristán siempre opta por elegir la siguiente película que hizo con Garci, ‘Solos en la madrugada’.
‘El diputado’ (1978)
Transgresora donde las haya, el filme dirigido por el revolucionario Eloy de la Iglesia centraba su argumento en Roberto Orbea, personaje que aunaba dos temas difíciles de encajar: la política y la homosexualidad. Un diputado de izquierdas, aparentemente muy feliz con su esposa, tiene amantes clandestinos en un discreto piso propio. Sacristán, “felizmente” casado con María Luisa San José, conoce a un peculiar joven que llega a la vida del político para cambiarla (por completo). La película fue la primera cinta de ficción en unir la homosexualidad con la vida política, temas hasta entonces, imposibles de encajar.
‘Un hombre llamado flor de Otoño’ (1978)
Basada en la pieza de teatro ‘Flor de otoño’, el filme dirigido por Pedro Olea también marcó un antes y un después en la historia del cine español. Además de tratar la homosexualidad, la película también aunaba el transformismo. La dualidad del personaje encarnado, magistralmente, por José Sacristán. Lluis, abogado noble trabajaba de noche de transformista en un cabaret. Con Francisco Algora y Carmen Carbonell, esta última madre entendedora del protagonista, completaban el reparto de la premiada película. Uno de los múltiples galardones recibidos fue, precisamente, para José Sacristán. El actor se alzó con la Concha de Plata a la Mejor interpretación masculina en Donostia.
‘La vaquilla’ (1985)
El cómico teniente Broseta (José Sacristán) protagonizó el magistral retrato que Luis García Berlanga hizo, en el año 1985, sobre la Guerra Civil. Mediante el registro de la comedia y reuniendo un gran sequito de soldados republicanos de lo más disparatados, el reparto lo completaban Alfredo Landa, Santiago Ramos o Guillermo Montesinos entre otros grandes nombres. Escasos años más tarde, en 1993, Sacristán también formaría parte del reparto de ‘Todos a la cárcel’, la penúltima película de Berlanga y una de las más singulares de su prolífica filmografía.
‘Cara de acelga’ (1986)
En 1986, tras dirigir ‘Soldados de plomo’, el de Chinchón dirigió de nuevo. Su segunda película, ‘Cara de acelga’, es una de las menos conocidas de su trayectoria, y, sin embargo, es uno de sus mejores títulos. El actor interpreta a un vagabundo ambulante que espera a que alguien le recoja. Una narración que combina el estilo road-movie, y que fusiona el drama y la comedia en un título de lo más curioso en su filmografía. De lo más interesante. En 1992, volvió a dirigir por tercera vez. Lo hizo junto a Concha Velasco en la adaptación teatral ‘Yo me bajo en la próxima, ¿y usted?’.
‘El viaje a ninguna parte’ (1986)
Titulo esencial en la historia de nuestro cine. Dirigida y protagonizada por el gran Fernando Fernán Gómez y basada en su propia novela, narraba la ambulante vida de unos comediantes que giraban representando por locales de toda España. José Sacristán, que se enteraba de la existencia de un inocente Gabino Diego, que se unía a la compañía al ir con su padre. El filme es el primero en recibir el primer Goya a Mejor película, arrasando también en el resto de las categorías de aquella primera recordada edición de los premios Goya.
‘Un lugar en el mundo’ (1992)
Como primera aproximación al cine argentino, Sacristán, acompañado de Federico Luppi o Cecilia Roth, protagoniza este viajero filme, que se nutre de los recuerdos, la emoción y la perfecta construcción cinematográfica. Dirigida por Adolfo Aristain, Sacristán pudo lucirse notablemente con un personaje emotivo, libertario, luchador y lleno de coraje. El personaje principal viaja a Buenos Aires, donde se une a una cooperativa agrícola que decide luchar por sus no cumplidos intereses sociales.
‘El muerto y ser feliz’ (2011)
En los últimos años, la demanda de cine ha disminuido considerablemente, aunque José Sacristán ha tenido la fortuna de aceptar grandes personajes que han sido respaldados por majestuosas interpretaciones, como su aparición en la magistral ‘Magical Girl’. Particularmente, destaca ‘El muerto y ser feliz’, cinta que en 2011 dirigió Javier Rebollo y que es la única que le ha hecho recibir el Goya a Mejor actor protagonista en 2012. Una película movida, viajera, en la que interpreta a un asesino a sueldo, gravemente enfermo, que depende de la morfina y que hace desprender una actitud de lo más peculiar en este ambientado thriller.
