Bienvenido a Los Lunes Seriéfilos: cine, series, televisión y entretenimiento

Review Shameless 6×07- 6×11

Es increíble lo rápido que pasan las temporadas de Shameless. Y no sé si es que ahora que tengo menos tiempo para escribir la cosa se acentúa, o qué. El caso es que os traigo mi resumen la recta final de la temporada, a falta del último capítulo que se emite esta noche. La conclusión es que este ha sido otro año movidito para los Gallagher. A partir de aquí, spoilers.

Lo mejor será intentar resumir un poco la trayectoria que han ido llevando todos durante esta temporada. Empecemos por la líder del clan. Fiona ha mantenido su relación con Sean a pesar de que siempre está ahí esa sensación de que algo no funciona, de que no son buenos el uno para el otro. No sé muy bien como explicarlo, porque realmente Sean se ha portado muy bien con ella y con su complicada familia, pero aún así a veces salen a la luz ciertas actitudes que hacen evidente que este no es el hombre para Fiona. De hecho, creo que debería atreverse a pasar una temporada sola, preocuparse de ella misma y dejarse de problemas. Porque lleva una racha de cagadas que empieza a ser preocupante. La última de ellas con el dichoso anillo que le regaló Gus antes de que su fugaz matrimonio se fuera al garete.

Hace un par de capítulos aceptó casarse con Sean y de repente Fiona es otra y ha puesto todas sus ilusiones en celebrar un gran bodorrio. Otra actitud que no me pega en ella y que creo que denota que algo no funciona. Esa necesidad de que sea todo perfecto solo por tener un buen vestido o una buena iglesia no garantiza ningún éxito.

Y es que creo que Sean no quiere realmente estar con los Gallagher, quizás pueda soportarlos un rato, pero no siempre. No creo que de verdad esté preparado para entrar en la vorágine que es esa familia, ni se le ve con ganas de intentarlo. Y creo que ahí es donde chocará de lleno con Fiona. 

Sí que hace el papel de protector y es cierto que ha ayudado a la familia, pero da la sensación de que él ve esto como algo temporal, que tarde o temprano podrá irse solo con Fiona y olvidarse del resto. Y dudo que eso sea algo que ella contemple.

El otro frente que ha tenido Fiona es con Debbie, con la que no ha sabido lidiar durante su embarazo. Cierto es que pienso que Debbie ha cometido un error garrafal y se ha cerrado a Fiona. Es muy triste verlo, sobre todo ahora que la pequeña Frances ha nacido y Fiona está completamente apartada. Ojalá en este último episodio lo arreglen y vuelvan a confiar la una en la otra.

Siguiendo con Debbie es definitivamente la trama que menos me ha gustado de la temporada. No entiendo a qué viene, qué aporta y pienso que ahora obliga al personaje de Debbie a seguir un camino que no le pegaba nada, que no va a ser interesante, que está hasta muy visto en otro tipo de series e historias. Lo mismo la próxima temporada me trago mis palabras, pero de momento no me gusta nada esta trama. Además siempre he dicho que está muy mal justificada. La razón por la que Debbie decide quedarse embarazada es tan estúpida que me cabrea bastante. 

Pero bueno, lo hecho hecho está. Ahora que ya ha nacido su hija he de reconocer que se me ha partido un poco el corazón, porque está claro que se le va a venir el mundo encima, se va a dar cuenta de que no todo es un cuento de hadas y que ser madre no es tan fácil como ella piensa. Ojalá en el último epiodio ceda un poco más y se deje ayudar realmente y, sobre todo, que se reconcilie con Fiona.

Quien sí ha tenido una evolución grandiosa, quizás la mejor de la temporada, es Carl. Empezó con ese rollo de gangster cutre y la realidad le golpeó de manera brutal, hasta el punto que se da cuenta de que quizás jugar con los malos no era tan divertido. 

Ha visto que la misma adrenalina y riesgo se puede vivir desde el lado de la ley. Me parece simplemente brillante que haya encontrado un camino que seguir y que se haya dado cuenta de que Fiona no es la mala de la película y que tampoco es perfecta. Además, nos ha regalado algunos de los momentos más tiernos de la serie este año. Ver a Carl madurar, por fin, ha sido enorme. Ahora queda ver si esta fase dura o pronto vuelve a las andadas. Pase lo que pase es el rey indiscutible de esta temporada.

Otro que ha salido del agujero ha sido Ian, que desde la temporada anterior estaba en una fase depresiva y destructiva que nos estaba haciendo daño a todos. Sí, se ha echado muy en falta a Mickey, pero por otro lado me ha encantado ver a Ian centrarse, descubrir un amor más sano. Me refiero a que él no está acostumbrado a que le traten bien, a confiar en alguien, a tener una cita como una persona normal. Obviamente preferiría que esto hubiera pasado con Mickey, pero de momento no podrá ser. El caso es que Ian necesitaba esta estabilidad y eso le ha permitido descubrir qué quiere hacer con su vida. Me parece tan acertado que Ian se dedique a ayudar a los demás. Su encuentro con Mandy, fue precioso (y es una pena que ella ya no siga en la serie) Siempre ha sido el buenazo, el más sensible de la familia y parecía que nos habíamos olvidado de todo esto. Es cierto que su enfermedad sigue ahí y como vimos en el último episodio, seguirá siendo un obstáculo para algunos temas, pero ahora al menos tiene un objetivo y está dispuesto a luchar por él. Menuda diferencia del primer capítulo de la temporada a esta recta final.

Y mientras unos salen de la espiral destructiva, otros entran de lleno. Ya lo he dicho muchas veces, a Lip el amor le sienta mal y su ruptura con la profesora ha sido un revulsivo en su vida. Es verdad que tiene muy mala suerte y siempre le dejan por una razón o por otra, pero no sabe lidiar con ello. Y ahí es donde su sangre Gallagher hace acto de presencia y recordamos que él siempre ha sido el más parecido a Frank y el que más papeletas tiene de seguir sus pasos. Lo peor es que en estos últimos capítulos ha avanzado a pasos agigantados. Hemos visto a un Lip más perdido que nunca, que poco a poco está destrozando todo lo que tiene. Al principio parecía el Lip fiestero y que se lleva a todas de calle, como siempre y más en una hermandad donde solo hay chicas. Pero estos últimos episodios hemos visto cosas muy preocupantes como que beba para ir a clase, verle ‘estudiar’ en el bar. Y por supuesto su discusión con el profesor al que había tomado casi como un padre solo lo ha empeorado todo. Y lo peor es que él no se da cuenta de que se le está yendo de las manos. Me da mucho miedo que Lip siga por ese camino y me da la sensación de que esto no quedará arreglado en la season finale de esta noche y será algo que veremos ir a más en la próxima temporada. 

Por último queda hablar de Frank, que sigue siendo el cabrón de siempre. Si la temporada pasada vimos un atisbo de sensibilidad, esta ha desaparecido. Sí que hemos observado su devoción por Debbie, pero sabemos que es porque es la única que aún (incomprensiblemente) no le ha mandado a la mierda. Frank ha mirado por sí mismo, como siempre y ha arrastrado a otros consigo. Inolvidable esa sustitución que hace de Carl, con trencitas incluidas y pegándose una buena fiesta de la coca. Impagable también su estancia en la comuna hippie. Frank es un superviviente, de eso no hay duda. Pase lo que pase en el mundo el consigue salir airoso de todo, desde escapar de unos matones a convertirse en el más deseado de la comuna. Ahora incluso actúa en plan padrazo que quiere pagar la boda de su hija, porque dice que ya no quiere perderse más cosas importantes de la vida de sus hijo. Y es que Frank quiere tener su sitio, aunque sea solo para observar como su familia se va a la mierda, porque él lo de ayudar no lo ve. De ahí ese choque brutal con Sean que por lo que vimos al final del 6×11 traerá consecuencias muy extremas. Frank ha sobrepasado un límite demasiado grande. Imagino que todo esto se resolverá en tono de humor o con alguna burrada tipo Shameless, pero no quita la gravedad de lo que ha hecho. Sinceramente a veces resulta irritante que Frank salga airoso de absolutamente todo. 

+

Mientras tanto Kev y Verónica siguen siendo una pareja genial. Es increíble el nivel de confianza que pueden llegar a tener. Es raro ver en Shameless una pareja tan estable, comparado con todas las demás. Eso sí, ahora hay que incluir a Svetlana, personaje que ha ido ganando protagonismo y cada vez es más genial. No sé si esta idea del trío va a algún sitio, pero es muy divertido y un gran alivio cómico entre tanto drama. 

En definitiva, creo que esta temporada de Shameless ha sido buena. No la mejor, pero definitivamente me ha gustado más que la anterior. A pesar del horror que han hecho con Debbie. Veremos que nos guarda la season finale. A mí siempre me da mucho miedo y esta tiene pinta de que va a traer drama a raudales. Preparémonos y sobre todo, armémonos de paciencia porque a partir de esta noche o mañana queda un largo año de espera hasta la próxima temporada.

¿Quieres recibir todas las mañanas las publicaciones del blog? Suscríbete a nuestra newsletter y te llegarán al correo bien fresquitas para disfrutarlas con el café

ARTÍCULOS RELACIONADOS

DEJA UNA RESPUESTA

Introduce tu comentario
Por favor, introduce tu nombre

SIGUENOS EN REDES SOCIALES

Mejor Blog 2013 en categoría Cine y Televisión

SUSCRIBETE A NUESTRA NEWSLETTER

ULTIMOS ARTÍCULOS